Visitas:245 Autor:Editor del sitio Hora de publicación: 2024-07-08 Origen:Sitio
Los codificadores ópticos operan en función del principio de interrupción de la luz para generar señales que representan movimiento o posición. Los componentes centrales de un codificador óptico incluyen una fuente de luz (generalmente un LED), un fotodetector, un disco de código y circuitos de procesamiento de señal. Aquí hay una descripción concisa de su principio de trabajo:
1. Fuente de luz: el LED emite un haz de luz hacia el fotodetector.
2. Disco de código: colocado entre la fuente de luz y el fotodetector, el disco de código es una placa circular con secciones (patrones) transparentes y opacos que giran con el movimiento del eje del codificador.
3. Fotodetector: a medida que gira el disco de código, los patrones alternativos bloquean intermitentemente y permiten que la luz pase al fotodetector. Esto crea una serie de pulsos de luz.
4. Procesamiento de señales: El fotodetector convierte estos pulsos de luz en señales eléctricas. Luego, estas señales se procesan para generar salidas digitales que corresponden a la posición o movimiento del eje del codificador.
Para los codificadores incrementales, el disco presenta líneas espaciadas uniformemente y el sistema cuenta los pulsos para determinar el movimiento. Los codificadores absolutos, por otro lado, utilizan patrones únicos para cada posición, lo que les permite determinar la posición exacta sin necesidad de hacer referencia a un punto de partida.
Los codificadores ópticos son muy valorados por su precisión y confiabilidad a la hora de convertir el movimiento mecánico en señales digitales, lo que los hace indispensables en diversas aplicaciones que requieren un monitoreo preciso de la posición o la velocidad.